Buenos días a todas y todos. Bonos díes a toes y toos. Me hace mucha ilusión estar aquí hoy y lo primero de todo es pedir disculpas por no utilizar el asturiano de primeras para dirigirme a ustedes. Cuando desde Iniciativa pol asturianu me invitaron a ser la pregonera de este IV Día de la Llingua Asturiana sentí un inmenso honor, una gran responsabilidad y reconozco que alegría y miedo a partes iguales. De pequeña no tuve acceso al asturiano. Ni en el ámbito educativo, ni en el público ni el privado, no se hablaba en el entorno en el que yo crecí, como le ha pasado a mucha gente de mi generación. Sin embargo si tengo recuerdos de pequeña, de pasar gran parte del verano en Galicia, la tierra de mi padre, donde todos falaban galego y aquello era lo normal, lo natural y lo bonito. Y mi oído si creció naturalizando esa lengua que tanto me gustaba y me gusta. Digamos que crecí por tanto conociendo más la lengua vecina que la mía propia.

Por mi profesión, el periodismo, me fui de Asturies en un viaje que duró 15 años y que me permitió viajar mucho por toda España, visitar muchos lugares y conocer y compartir con gente muy diversa. Personas que amaban, aman, su lengua propia y que conviven con ella con absoluta normalidad y respeto. Y os diré que en silencio o en el fondo un poquito empecé a envidiar, si es que hay envidia de la buena, ese tesoro, esa riqueza lingüística de los amigos que hice por el camino y aún conservo, muchos de ellos valencianos, payeses y catalanes, y un buen puñado de gallegos y algún vasco. De vuelta a casa, a mi tierra, hace ahora 3 años, es en mi etapa adulta donde estoy pudiendo enamorarme de la mía, de la lengua asturiana. Y es en buena parte gracias al trabajo incansable de muchos y muchas que la habéis cuidado, la habéis dignificado y hacéis con vuestra dedicación incansable que la llingua sea accesible para personas como yo, que no crecimos con ella con naturalidad. Aprovecho para dar públicamente las gracias a quienes integráis Iniciativa pol Asturianu por contagiarme el amor por nuestra lengua. Por ayudarme a vencer ese miedo que a veces o casi siempre se tiene a lo desconocido. Gracias por hacerla accesible.
Así que con vuestro permiso voy a seguir en asturiano, pidiendo disculpas de antemano porque es la primera vez que voy a utilizarlo en público y mi pronunciación no va a ser perfecta, así que gracias por la comprensión.
Dicía-yos al entamu que cuando Inaciu Galán me propunxo ser la pregonera d’esti cuartu Día de la Llingua Asturianu na FIDMA, entróme mieu. Oxalá tar güei equí anime a otres persones d’Asturies a abrazar la llingua asturiana a cualesquier edá, namás interesándonos pol nuesu patrimoniu llingüísticu vamos llograr vencer la desinformación.
La llingua asturiana nun dixebra, la llingua asturiana xúnenos como pueblu, ye daqué nueso, de toos y de toes. Tenemos la suerte de vivir nun país con una diversidá y bayura cultural estraordinaries. Y al igual que salimos a glayar arguyosos, arguyoses, que la nuesa sidra ye mundial, al igual que presumimos de cultura sidrera, tenemos motivos pa presumir d’esta otra ayalga asturiana: l’asturianu ye bayura cultural que nun tenemos de perder. Quien tien una llingua propia tien una ayalga.
Cada vegada más voces cántenla, acoríquenla dende les artes, cada vegada más voces espublizámosla al traviés de los medios de comunicación, cada vegada más neños y neñes, a lo último van tener accesu a ella na so etapa educativa. Porque la llingua asturiana suma, nunca resta. Ye riqueza.
Gracies a los que siempres tuvistis ende, abrigándola. Debémosvos enforma. Una alcordanza especial pa Xuan Bello que la curio coles sos lletres y güei taría celebrándola. Y los mios meyores deseos pa esta nueva etapa na presidencia del colectivu a Arantza Margolles.
Gracies por acoyeme ensin prexuicios, por convidame a formar parte d’esti día tan especial. Feliz cuartu Día de la Llingua Asturiana na Feria Muestres.